El aborto es un tema que es frecuentemente debatido en la
sociedad. Por un lado, los que estamos en contra que luchamos por la vida de un
niño en el vientre de su madre, y por el otro lado los que ignoran que cada
acto tiene sus consecuencias.
En Honduras el aborto es ilegal y muy criticado por su
sociedad, ya que la mayor parte de la sociedad hondureña es bien religiosa.
Esto lleva a que muchas personas tengan una mala opinión sobre el aborto, por
lo general, los adultos mayores. En la Biblia hay un versículo que dice, “Dios es el dador y dueño de la vida y solo Él tiene derecho
a quitarla.” Muchos de los que están a favor del aborto dirán que es el
cuerpo de cada quien, y ellos harán lo que quieran con su cuerpo, pero desde
que el óvulo es fecundado ya hay una vida nueva, y ya viene con el derecho de
la vida.
Aunque el aborto en Honduras sea ilegal y penalizado, muchas
mujeres que no están en la condición para cuidar un bebé lo practican. No
cuesta mucho, solo Lps. 4,400.00. Varias de las mujeres que consideran como opción
el aborto son jóvenes que fueron víctimas de violaciones o solamente no fueron
informadas desde jóvenes a seguir buenos pasos y quedaron embarazadas a
temprana edad. En el segundo caso, estas jóvenes tienen que darse cuenta que
todo acto tiene sus consecuencias y aunque no estén listas para cuidar a otro
ser humano tienen que llevar a este a una vida digna.
Según el sitio http://www.revistazo.biz,
4 bebes son encontrados entre la basura de Tegucigalpa. Esto es por las madres
que no votaron por la opción del aborto, pero estos bebes no están teniendo una
vida digna. En Honduras hay varias opciones para las madres que no están listas
para cuidar a un niño, y ninguna incluye un basurero. Ya le han dado vida a un niño,
ahora ese niño merece una familia, un hogar, y estos hay. Hay hogares para
niños, orfanatos, otras familias que con gusto se harían cargo de otorgarles un
hogar a un niño más. Por eso no hay escusas y no viene a opción el aborto.
Debe entenderse que al aceptar el aborto se lleva a la
devaluación de la vida humana, por lo que, si en el presente se permite el
homicidio de un pequeño ser humano indefenso, entonces en el futuro será fácil
matar a cualquier individuo o grupo en desventaja que se considere “inferior”.
No le abstengamos el derecho de vida a un pequeño ser humano
que puede llegar a convertirse en alguien importante para la sociedad, más bien
hay que guiarlo en un buen camino para que crezca y sea un buen ser humano.
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