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La legalización del aborto es un tema que viene a tomar gran importancia para
la sociedad hondureña con la aprobación del nuevo Código Penal de Honduras. Más
de veinte organizaciones sociales pertenecientes al colectivo Somos Muchas por la Libertad y la
Vida de las Mujeres, incluyendo al Centro
de Derechos de Mujeres,
el Centro
de Promoción de la Salud y Asistencia Familiar, y varios grupos feministas independientes,
se han abocado al Congreso Nacional con la esperanza de hacer de la discusión
del nuevo Código una oportunidad para descriminalizar el aborto en Honduras
bajo circunstancias específicas.
Quisiera
iniciar la defensa de mi postura aclarando que estar en pro de la
despenalización del aborto no es sinónimo de estar en contra
de la vida. El termino pro-elección hace referencia a la creencia en el derecho
de una persona en aptitud de concebir a tomar decisiones informadas,
responsables y autónomas respecto a su sistema reproductivo; ya sean estas por
medio de acceso a educación sexual no restringida, métodos anticonceptivos, y
(como último recurso) al aborto electivo. Dicho movimiento busca defender y
apoyar estas decisiones, sea que terminen en el nacimiento de un bebé o no,
buscando reducir en lo posible los riesgos a la salud mental y física de la
mayor cantidad de personas posibles.
Si son
fácilmente accesibles todas las demás opciones para prevenir embarazos, el
aborto no debería ser la primera elección para la mayoría de los casos. Sin
embargo, esto no significa que dejarán de existir mujeres para quienes sea
necesario llevar acabo el procedimiento, y penalizar o prohibirlo simplemente
pone en riesgo a muchas más personas, quienes quedan a la merced de
procedimientos clandestinos inseguros. Aproximadamente 1 de cada 279 mujeres
que se realizan un aborto clandestino muere innecesariamente, mientras que un
aborto médico realizado por profesionales en condiciones adecuadas solo tiene
una probabilidad de 1 en 10,000 de causar la muerte de un paciente.1
Considero
justa la despenalización del aborto en nuestro país bajo las 3 causales
sugeridas por los gurpos mencionados anteriormente:
1. En caso que la concepción sea
resultado de abuso sexual.
En la
primera mitad del año pasado se presentaron para evaluación médica 1,579 casos de abuso sexual contra mujeres,
un 60% de las cuales se encontraban entre los 10 y 19 años 2, poniendo a las menores de
edad en mayor riesgo a sufrir este tipo de agresión resultante en un embarazo
prematuro y no deseado.
Debido a
la naturaleza involuntaria e impredecible de una violación, es muy poco
probable que la víctima pueda tener acceso a anticonceptivos, especialmente si
se trata de una menor de edad, y en luz de a la prohibición de métodos
contraceptivos de emergencia, la única opción restante para interrumpir un
embarazo no deseado es el aborto.
No todas
las mujeres cuyo embarazo es causa de una violación consideran necesario
abortar, y personalmente no considero justo requerir o esperar que la madre
aborte por el hecho de haber concebido a raíz de un evento traumático. Sin
embargo, pienso que de la misma manera que una persona no está obligada a donar
un órgano, aunque este pueda salvar la vida de otra, una gestante debería tener
el derecho a decidir si en su actual estado físico, psicológico,
socioeconómico, etc. está preparada para/es capaz de completar el término de su
embarazo y dar a luz a un bebé; y luego hacerse responsable de lo que conlleva
cuidar de este o darlo en adopción.
2. Cuando pone en grave riesgo la
salud y la vida de la mujer
El
embarazo no es un proceso 100% libre de riesgos, en América el embarazo es la
tercera causa de muerte más común3.
Si una complicación causada por el embarazo puede causarle daños irreversibles
a la salud de la madre o llevarla a la muerte, pienso que es razonable
brindarle acceso a un procedimiento que podría prevenir la pérdida de su vida
mucho antes que dichas complicaciones se presenten, especialmente en un país en
el que el acceso a tratamiento médico inmediato es limitado.
3. Cuando no hay probabilidad que el
feto sobreviva afuera del útero de la madre
El
embarazo altera el cuerpo humano significativamente y trae consigo una variedad
de síntomas y consecuencias. Es en mi opinión innecesario forzar a todas las
gestantes a pasar por el proceso completo cuando el producto no podría ser
capaz de sobrevivir al momento de nacer, ya que esto podría prolongar y agravar
las consecuencias tanto físicas como psicológicas de este tipo de embarazo.
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