La
corrupción en Honduras se remonta desde los inicios de Honduras misma, como país
independiente, con el robo de los fondos para la construcción de un ferrocarril
en 1867, y así a lo largo de toda su historia terminando el siglo IXX, pasando
todo el siglo XX, e inclusive llegamos
al siglo XX y se siguen dando los actos de corrupción en muchos ámbitos
gubernamentales; solo que últimamente ha sido de un modo superlativo, exagerado
y desmedido, pensando los responsables de estas acciones que pueden hacer lo
que quieran y salir impunes. No contaban con que las personas se hartarían de
esto, que en algún punto se cansaran de tanto, y en vista de que no hay
respuesta de las autoridades en castigar a los responsables, las personas encolerizadas
han salido a las calles de todo el país a mostrar su disgusto en las
denominadas “Marchas de las Antorchas”.
Las marchas de Las Antorchas son el resultado de todos
los actos de corrupción de los políticos, en especial con lo sucedido con el
Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS), y de la sobre limitada
paciencia de los hondureños, que quieren dar a conocer su enfado ante las
autoridades hondureñas. Se usan antorchas, no por cualquier cosa, sino como luz
en la oscuridad, y como un símbolo de los pacientes que han muerto en el seguro
social, por la falta y la mala calidad de los medicamentos, y esta es el
principal motivo de las marchas. Cada vez se ve como se han ido sumando en muchos
lugares de Honduras, personas que están
a favor de las manifestaciones, y por el otro lado, también se ve quienes están
en contra.
Ricardo Romero González, cronista del diario La
Tribuna, asegura que el desagrado de los hondureños se remonta al 2009, por el
golpe de estado que sufrimos, lo que nos dividió como país, provocando una
“reducción drástica de la confianza de la gente a sus instituciones públicas y
perdimos el respeto por las ideas de los demás”. Es una problemática que se ha
ido acumulando desde hace algunos años, pero en el anterior gobierno, del
exmandatario Porfirio Lobo Sosa, no sucedió nada como vemos hoy, por algunos
simples motivos: en su gobierno no se implementaron las recomendaciones dadas
por la comunidad internacional, una comisión de la verdad, para tratar de “sanar”
al país y a las personas con lo que había ocurrido con el golpe de estado, pero
tampoco se hizo lo contrario, “enfurecer” a las personas o a otros partidos ni
nada parecido, en resumen ni se hizo mucho para calmar las cosas ni se hizo
algo para hacer explotar a las personas, fue algo neutro lo que sucedió. Cosa
contraria sucedió y sucede con el actual gobierno, y debido a la falta de
confianza de las personas a las autoridades de gobierno, y los actos de saqueo al Instituto
Hondureño de Seguridad Social (IHSS) y demás acción de corrupción, que se han
vuelto una constante de forma lamentable, que no se han castigado y donde los
responsables se “salen con la suya” o creen eso, se nota cada vez más el enfado
de los hondureños, de los indignados que hacen lo que está a su alcance,
manifestarse, para tratar de hacer o de conseguir algo bueno por su país,
terminar con la corrupción y que se castigue a los corruptos.
Esa es la finalidad de las marchas, poner fin a
la impunidad, pues los actos de corrupción son cada vez más descarados lo que
provoca un mayor enfado, buscar castigo para los culpables y la creación de un
ente que se encargue de evitar que cosas como esta sigan ocurriendo y que tome
las medidas para castigar a quienes hagan acciones ilícitas de esta índole. Inclusive
grandes personalidades de Honduras han estado presentes en las manifestaciones,
pues los excandidatos Mauricio Villeda y Salvador Nasralla, han confirmado su
participación en las marchas, incluso Mauricio Villeda comentó en una red
social su participación en una marcha, como ciudadano común y no como
representante de un partido. Esto demuestra que existe un desagrado que se ha
vuelto muy común entre muchos hondureños hacia el gobierno y los corruptos, un
deseo de hacer que las cosas cambien hacia bien, de detener lo malo que está
sucediendo y que afecta de una manera tremendamente negativa a Honduras y a los
hondureños.
El movimiento de los llamados “Los Indignados” que
son los responsables de convocar a las manifestaciones, que ahora son una persistente
acción que se da a conocer por diversos medios de comunicación e incluso por
las redes sociales, como el caso de Mauricio Villeda; está conformado por
jóvenes, de universidades y de colegios públicos, y por otras personas que se
les han unido en la lucha, por eso la gente opina mucho a favor de los jóvenes,
de las medidas y acciones que están tomando y de las marchas. Además son
manifestaciones pacíficas, y mientras se mantengan de esa manera, no debe de
existir problema alguno, pues tienen derecho las personas a manifestarse mientras
su causa sea real y afecte a la mayoría de la población, lo cual es así, y en
especial porque es en busca de la justicia, que es lo que se clama en cada
marcha. Hasta cierto punto son necesarias estas manifestaciones para que vean
todos en el país, para mostrar la indignación de las personas, su disgusto y
desagrado hacia los culpables o supuestos culpables (pues las personas son
inocentes hasta mostrar lo contrario) que culpan en las marchas de las acciones
que les llevaron a salir de sus casa y con sus antorchas marchar enojadas, ya
no quieren que les mientan y que quieran soluciones rápidas. Por otro lado
también el hecho de salir a las calles a marchan puede molestar a otros o solamente
no importarles lo que hacen los demás, por ejemplo por interrumpir el flujo
normal de tráfico en las ciudades donde se manifiestan u otras razones más
específicas que tengan otras personas pueden no gustarles que la gente salga a
marchar. Otros por otro lado simplemente no están de acuerdo con las mismas.
Las
Marchas de las Antorchas, es un movimiento que está logrando unir a Honduras,
por lo menos con quienes si están de acuerdo, quienes van a marchar y quienes
les apoyan a la distancia, sea que los vean en la tele, escuchen por radio o comenten
en las redes sociales, todo tiene que ver y todo eso es parte y es un apoyo
necesario para que las personas no se canse de lo que hacen, pues las
manifestaciones se hacen a lo largo de toda la nación, no solo en la capital,
porque el desagrado es generalizado en toda Honduras. Así afirma el dirigente de los indignados
Ariel Varela: “Vemos que los partidos políticos, sectores de izquierda, centro
y derecha, el magisterio y demás se empiezan a manifestar, logrando unidad en
el país.” Al fin de cuentas un país unido es la mejor manera de poder
solucionar cualquier situación o problemática en general que pueda o nos afecte.
Claro, no siempre todos van a estar de acuerdo con las manifestaciones, incluso
les hacen acusaciones de evadir el fisco. Así lo anunció Ebal Díaz por
información de la DEI, en el diario La Tribuna: “A nosotros nos sorprende que
en estas marchas, llevan miles y miles de antorchas y nos decía la directora de
la Dirección Ejecutiva de Ingresos, Miriam Guzmán, que está permanentemente
monitoreando, que esas antorchas entraron por punto ciego, es decir hay una
defraudación al fisco”. Agregó que: “Solo aparecen en inventarios e
introducción legalmente al país, menos de cuatro mil antorchas que pagaron
impuestos, y el resto entraron, ni siquiera por puntos legales, sino por puntos
ciegos”. Y obviamente, esto suena muy irónico, hacen las marchas para luchar
contra la corrupción de las autoridades gubernamentales, con antorchas que no
son legales. Pero, por el otro lado, en medios radiales han salido a la defensa
de los manifestantes, diciendo que muchas antorchas son hechas en casa y no
compradas, y que esta puede ser una respuesta a las acusaciones de las
antorchas que no aparecen en inventario de pago de impuestos. Otro medios pueden
censurar o no estar de acuerdo con ellos y acusarlos, sabemos que los medios no
son objetivos, fallan, etc., aunque ese no es el tema. De cualquier forma, sea
cual sea la verdad, siempre hay dos bandos en cualquier conflicto, lo
importante es que se mantenga pacífico y se logren castigar a los culpables y
se haga lo mejor para Honduras, aunque se requiera de la participación de
instituciones u organizaciones internacionales.
Un problema que puede suceder es cuando manifestaciones
como estas y de este tamaño se tornan violentas, es cuando se comienza a perder
esta o cualquier “lucha”, se deben mantener pacíficas para que se tomen en
serio, de otra manera se toman medidas, por ejemplo: llega la policía y
dispersa a los manifestantes, pudiendo llegar al extremo de prohibir las
marchas, entonces todo por lo que se han sacrificado quedaría desperdiciado, porque
se dejaría de ver las marchas como un signo de disgusto y se vería como
manifestaciones violentas y como un problema y lograr lo que buscan sería
imposible. Según el diario La Tribuna, en la edición del 4 de julio, la sexta
marcha “no estuvo tranquila” cuando algunos infiltrados soltaron gas pimienta
cuando llegaron a la Casa de Gobierno. Incluso, entre los manifestantes se
decía que estaban rodeados por francotiradores, lo que provocó temor entre
ellos, principalmente por los padres a quienes acompañaban sus hijos. Cosas como estas son las que se deben de
evitar, por parte de ambos bandos, para que se pueda llegar a una solución o que
se cumplan las peticiones de los manifestantes, pero también las autoridades
deben escuchar a las personas que están manifestando, pues a veces parece que
están esperando a que se cansen o se den por vencidos, en lugar de enfrentar
los cargos de los que les acusan, pues en las marchas se puede escuchar un
grito unificado: “Fuera JOH”, refiriéndose al presidente de la República Juan
Orlando Hernández por su culpabilidad en acciones que involucran al IHSS.
“El gobierno nacionalista de Juan Orlando
Hernández deberá poner mucho cuidado en su actuar, pues de seguir estas marchas
contagiando cada vez a más hondureños puede provocar hasta un paro nacional y
con ello una lamentable convulsión social hasta lograr la intervención
internacional.” (Martínez, 2015) Eso debería de ser evitado, para impedir
un revuelto internacional y todas las consecuencias que vendrían con ello. Informa
el diario La Tribuna en su portal en línea que inclusive las marchas y la busca
de la condena de los corruptos, ha salido de las fronteras Hondureñas, también
los inmigrantes han dado a conocer su descontento con los que sucede en el
país, haciendo sus propias marchas de antorchas en Estados Unidos, Miami y
Washington y también en España. Otra acción tomada por parte de “Los Indignados”
es que buscan la participación de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Hicieron una entrega masiva de firmas, entre 50 a 100 mil firmas, dio a conocer
el diario La Tribuna, que se recolectaron en las marchas de las antorchas que
se realizaron en la capital y en otras zonas del país, para terminar de validar
la petición, de una manera formal, a la ONU, exigiendo una Comisión
Internacional Contra la Impunidad en Honduras (CICIH).
En general, creo que las manifestaciones deben
hacerse, están bien, pero como dije antes, se mantengan pacíficas.
Esperemos que la resolución de todo el problema sea
positiva, que se castiguen a los responsables de tanta corrupción y que
Honduras como una nación unida, pueda encontrar la forma de superar su oscuro
pasado.
Foto tomada del diario La Prensa: http://www.laprensa.hn/honduras/851432-410/marcha-de-las-antorchas-ilumina-san-pedro-sula |
Bibliografía
(julio de
2015). La Tribuna .
González, R. R. (julio de 2015). La Tribuna .
Martínez, A. (25 de julio de 2015). Concurridas Marchas de
las Antorchas. El Heraldo .
Ochoa, C. A. (27 de junio de 2015). Las marchas de las
antorchas. La Tribuna .
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