¿Por qué callar si nací gritando?

imagen: www.noti-bomba.com/marcha-las-antorchas

¿Qué hondureño no sabe sobre la célebre marcha de las antorchas?  Y es que, el que no sabe realmente vive en una montañita allá lejos. La marcha de los antorchas la empezaron un grupo de hondureños que se hacen llamar los “indignados”.  ¿Los “indignados” de que o que? Indignados por la corrupción, la violencia, la falta de justicia, la pobreza, el desempleo, el hambre,  el analfabetismo, la indiferencia, y hasta del mismo gobierno. Los indignados, salen a la calle a protestar y exigir una Honduras mejor. También es un movimiento de las redes sociales, ya que estas personas se valen de hashtags como RenunciaJOH o LosIndignados.

Estas marchas iniciaron como consecuencia a la indignación y consternación que la población Hondureña ha tenido desde que se dio a conocer sobre el saqueo al IHSS, el carretillazo, y el problema de Astropharma. Y es que, ¿a quien no le indigna ver todas las propiedades que Mario Zelaya y los otros miembros de la administración del Seguro Social, compro a costillas de la vida del pueblo? 2,888 personas murieron a falta de medicamentos, de atención. Y más indignante es saber que jugaron con la salud de la población dándole medicamentos hechos de harina. ¿Realmente así de desvalorizada esta la vida en Honduras? ¿Somos capaces dejar  morir a millones por nuestra avaricia?

Creo que en efecto, las Marchas de Las Antorchas forman  gran parte de el aspecto político y social de Honduras, y es algo que realmente se debe de seguir. ¿Por qué callar si naci gritando? ¿Por qué tenemos que ver y callar sin jamás decir nada? Los hondureños siempre hemos sido señalados por un estereotipo de ser “pasivos, haraganes y sin valores” y estas marchas irónicamente lo contradice. Hoy en día somos un pueblo que ya se canso de ver tantas injusticias, como el caso de Kevin Solórzano, el universitario que supuestamente mato a un fiscal – que de por si no tenia buena fama- y que la única evidencia que hasta el día de hoy lo mantiene encerrado es el testimonio de la viuda del fiscal, y que hace unos días surgió un nuevo testigo afirmando que la viuda y el amante de esta fueron los autores del crimen. Pero, Kevin sigue encerrado, por que la justicia hondureña solo funciona cuando es el pobre, el criminal.

No es la primera vez que se desarrollan este tipo de marchas al nivel nacional, cabe mencionar que en Junio del 2009 también se empezaron a convocar personas para protestar en contra del Golpe de Estado al ex Presidente José Manuel Zelaya Rosales. La única diferencia entre aquellas marchas y estas es que la violencia. Aquel 2009 fue tan caótico que las autoridades tuvieron que forzar un toque de queda.

En mi opinión, estas marchas vinieron a revolucionar al hondureño pasivo, que creía que todo estaba bien si no le afectaba directamente. Hoy, muchos estamos unidos para ver que realmente se logre un cambio en Honduras. En lo que sí, definitivamente no estoy de acuerdo, es en que los protestantes piden la renuncia del 
presidente Juan Orlando Hernández. 

En estos momentos, que el presidente renuncie a su cargo traería de regreso el fatal golpe de estado del 2009. Cabe señalar también que el presidente ha hecho hasta el día de hoy su trabajo, y es el único presidente desde Ricardo Maduro que ha puesto mano firme y ha empezado a accionar. No es justo culpar  a Juan Orlando por todo lo que esté pasando en  el país, ya que la mayoría de los actuales problemas que enfrentamos son de años atrás, de gobiernos anteriores, que se han callado y han preferido mantenerse en silencio que hablar con la verdad. ¿Ustedes creen que de haber sido electa Xiomara Castro, todo el saqueo al Seguro Social hubiera salido a la luz? O mejor aún, ¿Por qué el presidente Porfirio Lobo jamás saco a la luz el informe sobre el saqueo si el ya tenía conocimiento de este? Creo que así como exigimos también debemos de elogiar al presidente porque está haciendo un trabajo digno para que Honduras cambie.

Las antorchas representan la fe y la esperanza que el pueblo hondureño todavía tiene para soñar con un cambio. Unámonos, combatamos la injusticia, la violencia, la delincuencia, la corrupción, la pobreza, el desempleo, el hambre; porque esto solo se puede si estamos unidos. Que no haya diferencias entre clases sociales, religión o partido político, porque al final del día todos somos hondureños, buscar el cambio nos pertenece a todos,  lo único que realmente tenemos es eso, ser hondureños.

Berta Navarro